El estuche japonés o chisu se hacian tradicionalmente articulados para resguardar los libros y darles consistencia, ya que las encuadernaciones de los libros en Japón solían se de tapa blanda. Normalmente estaban hechos de madera y tapizados con tela.
En este caso, en el curso de Kokoro encuadernación hice un estuche de cartón recubierto de tela. Las dos libretas del interior tienen un cosido típico japonés.